Para, no,
joder, qué haces... era
perfecto, joder, tenia el tiempo que neceistaba para sacarte de mi mente y de mi fondo de pantalla, sacar
tu puta sonrisa de mi garganta y tu tacto de la boca de mi estómago, un verano,
una aventura, la aventura de olvidarte, olvidarme de ti y cortar la enfermedad desde sus raices, tenía una aventura entera para odiarte, volver en septiembre,
hola, qué tal, un beso, lo siento durante estos meses he tenido tiempo para pensar... y libre.
Nada de felicidad en estado puro, pero
nada de frustración. Si no puede ser todo, que sea nada.
Pero mi plan,
maquiavélico y perfecto, no contaba con que en medio de mis murallas de arena podias aparecer tú cualquiera de estos
60 días y romperlas antes de haberlas siquiera terminado.
Con que
ninguna muralla que me rodee está hecha a prueba de ti.
=Me apetece estar allí...
+A mí también me apetece que estés.
No hay comentarios:
Publicar un comentario