viernes, 17 de agosto de 2012

And all the love I had for her you cannot touch it my golden hand cause it's guarded by your filthy promises.

Fueron dos semanas maravillosas, subir y bajar, correr, rozar los límites, cruzarlos sin miramientos, tu mano en la mía, tu beso en el mío, deshaciéndonos en energías que se renovaban todas las noches como las pilas recargables Duracel, tu mano en mi pelo, mis pupilas en tu mirada, las copas, las noches, ese no-se-qué que te hacía mío, qué fácil era creerse inmortal y qué difícil fue hacerse a la idea de que no lo éramos, no lo éramos, y qué difícil fue acostumbrarme a que nunca volverías para susurrarme una vez más que nos quedaba vida para rato...


I said "hey, girl, have you seen that film with those kids in New York in the eighties... oh, you have... Well, can I watch it with you anyway?"

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