sábado, 12 de mayo de 2012

Maybe I just don't believe.

Si lo hubiera sabido, tal vez se lo habría pensado dos veces antes de callarle con un beso. Si se hubiera dado cuenta, tal vez la emoción no se le habría quedado atragantada en el recuerdo. Si lo hubiera sabido, tal vez nunca habría llamado a esa puerta. Si lo hubiera sabido, tal vez habría bajado del autobús que acortaba sus distancias cuando sintió el impulso aquella noche. Porque es fácil caerse si se camina con una venda sobre los ojos. Si lo hubiera sabido...
Otra vez ese vestido lleno de volantes, ese lugar al que ya casi se le ha olvidado su nombre de tanto que hace que no pasa por allí, qué difícil es todo, se deja caer hasta el suelo, ojalá, ojalá, ojalá... esa sonrisa triste que la acompaña por la vida se ha convertido en una mueca de confusión, alguien ha accionado el interruptor en su cabeza y corazón, de pronto su corazón ha dejado de tener razones que su razón no pudiera entender, apoya los codos en las rodillas, a ver aclárate, mira las hojas que siguen igual de verdes que esos días, el suelo sigue siendo blanquecino, comprueba que sus manos siguen igual de suaves, se pellizca la punta del zapato, mira al rededor pero es inútil, no llega esa sensación, no siente su recuerdo clavándose en su pecho, y ya no sabe si se le caducaron los sentimientos y las ganas de darlos o si es que se ha acostumbrado a hacerse daño.


Y AÚN ASÍ SIGO SIN SABER DEJAR DE TEMBLAR A TU COMPÁS.


"Me dispongo a despegar. ¿Me vale la pena marear? Sangrar, decir, averiar, hacer el torpe...  O me da por preguntar de dónde has salido y qué valdrá marcharme lejos, cambiarlo todo por un monte.  
Quizá seas tú, quizá el control, quizá el fruto de un reventón,  quizá lo perro que me vuelvo por la noche. 
Quizá sea yo, quizá el temor, quizá el cariño al Rock and Roll o las historias que nos llevan al reproche. 
Me asusto y corro a pedir perdón, me pone malo esta situación, ¿por qué siempre al final algo falla? Nos vino a visitar la cruda realidad, entró sin llamar. 
Me conformo con bailar un rato con la felicidad. Cantarle un Blues, meterle mano, que me dé un toque.
Empezar a asimilar lo raro que es todo si no estás. Andar así no hay bicho humano que lo enfoque.
Quizá seas tú, quizá el control, quizá el fruto de un reventón,  quizá lo perro que me vuelvo por la noche. 
Quizá sea yo, quizá el temor, quizá el cariño al Rock and Roll o las historias que nos llevan al reproche.
Me asusto y corro a pedir perdón, me pone malo esta situación, ¿por qué siempre al final algo falla? Lo cambio todo y lo hago de un tirón, me río una vez más, y al final
Me asusto y corro a pedir perdón, me pone malo esta situación, ¿por qué siempre al final algo falla? Nos vino a visitar la cruda realidad, entró sin llamar.
Dos gotas se caen al mar. Una flota, la otra se ahoga. Las dos tiemblan, no por igual. Se fue, su par pensó 'that's life'.
Me asusto y corro a pedir perdón, me pone malo esta situación, ¿por qué siempre al final algo falla? Nos vino a visitar la cruda realidad, entró sin llamar."


"Lo miras desde fuera y, ¿qué ves? Una niña que empezó teniendo una rajita en el brazo, y se la fue abriendo, abriendo, la rajita se fue haciendo más y más grande, y como no haga algo al final se va a desangrar."

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