viernes, 29 de julio de 2011

No nos queda más que eso.

"La vie est une partie d'échecs." Cervantès.Una puerta de metal no es más que, al fin y al cabo, un chorrito de metal líquido e hirviente que metemos en un molde y después pintamos. Y la colocamos en el lugar que habrá de ocupar durante cierto periodo de tiempo, donde habrá de ser abierta y cerrada repetidas veces, testigo de besos dulces y besos amargos, testigo de lágrimas, de llaves atascadas y de enfados, de despedidas y de reencuentros truncados por la torpeza al hacer girar la llave, testigo de tantos Nosotros.
Una puerta de metal no es más que un trozo de acero bien colocado donde cumple su función, hasta que empieza a ser mucho más que eso.

Ella, con los ojos que él había atravesado con su mirada enrojecidos de tristeza, con la cara húmeda y la mirada fija en esa estúpida puerta, se hace un ovillo en el suelo y abraza sus piernas así como sus recuerdos.
Un cigarro consumido duerme a su lado mientras ella juega nerviosamente con el mechero y se esfuerza por controlar su respiración, en un momento se ve a sí misma fabricando Nosotros' con él, de pronto esta ahí, la temperatura de entretiempo, esa puerta y su sonrisa, un beso, ya nos veremos, que no, que otro beso, un abrazo, y ahora sí que me voy, y está bien...
El mechero ya no está en su mano, ahora se ha caído al suelo... no, no se ha caído, ha sido ella quien lo ha arrojado furiosamente contra el muro. A pesar de todo solo puede preguntarse por qué. No se pregunta por qué el sonrió al verla llorar, por qué el lo convertía todo en un juego del que forzosamente tenía que salir ganador, por qué no tenía su calor para dormir esa noche, por qué no podía olvidar sus manos o por qué necesitaba sentir sus brazos, solo necesitaba saber por qué no se terminaba de creer que, por mucho que esperase, él no iba a aparecer por esa puerta otra vez para hacerle morirse por enterrarle entre sus sábanas.


+Pase lo que pase, ya sabes que yo estoy aquí.
*Jaja, gracias, gordita...

No hay comentarios:

Publicar un comentario